¿Qué enfermedad afecta las células nerviosas del cerebro y la
médula espinal (neuronas), responsables del movimiento voluntario
que inexorablemente conduce a una parálisis progresiva? Estamos
hablando de la Esclerosis Lateral Amiotrófica conocida como ELA.
Una enfermedad neurológica que por lo que parece, está considerada
de rango secundario porque su implantación no alcanza el cupo exi-
gido para beneficiarse de una adecuada Investigación Biomédica.
Produce paulatinamente el debilitamiento muscular que impide el
movimiento de las extremidades superiores e inferiores y otras par-
tes vitales del cuerpo. En su avance, esta enfermedad provoca que
los músculos del área torácica dejen de funcionar, por lo que se
vuelve difícil o imposible la respiración, pudiendo provocar la
muerte de la persona afectada.
No existe curación alguna ni remedio paliativo para la Esclerosis
Lateral Amiotrófica. La fisioterapia, rehabilitación y el uso de
dispositivos ortopédicos permiten algún tiempo mantener parte de
la función muscular, aunque el progreso constante de la enfermedad
los hace poco más que inútiles. La asfixia es el factor común, es-
pecialmente en pacientes con limitaciones en su capacidad de deglu-
ción, sin embargo la ELA no afecta los sentidos y en general no
impide la capacidad de la persona para pensar y razonar.
La solución para poner freno a esta lacra, sacándola del pozo en
que se halla, no es otra que apostar decididamente desde la Sanidad
Pública por la Investigación Biomédica, dotándola de los recursos
adecuados, sin despreciar por supuesto, otras aportaciones de carác-
ter privado. En estas pocas líneas se ha intentado mostrar con toda
crudeza una brutal realidad en la que están involucrados tanto los
afectados como sus familiares, por nuestra triste protagonista:
la Esclerosis Lateral Amiotrófica.
Plataforma Activa per l'ELA
